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Desde cuándo existe el dilema de cómo llamarle a este delicioso producto, es algo que nadie sabe. Sus orígenes van tan pa’trás que sería imposible conocer a la primera abuelita que las cocinó o la primera tiendita frente a la escuela que las ofreció con un refresco. Solo sabemos que es una divertida conversación cada vez que alguien pregunta “¿Esto es una empanadilla o un pastelillo?” .
En Octubre de este año, en una entrevista con uno de los principales periódicos del país, los gerenciales de Kikuet comentaron sobre la controversia:
“Por lo menos lo aceptado en la industria es que la empanadilla tiene un cierre hecho a mano, es más grueso porque no es prensado. En este caso, el cierre a mano de la empanadilla tiene un concepto adicional, estás uniendo tres capas de la empanada. Es bien particular de Puerto Rico. Las de Argentina y otras no tienen el tamaño ni la forma. Es un producto único. Es un elemento bien importante en el balance de relleno con la trenza. Y la trenza aporta a eso. La trenza se hace a mano. No hay máquina que pueda cerrar eso de una manera que es una trenza que se conoce aquí en Puerto Rico.”
Por otro lado, aseguraron que el pastelillo es la fritura con un cierre prensado o a tenedor.
Así que ya saben. La próxima vez que se encuentren en una conversación sobre esta incertidumbre, sólo tienen que mirar el cierre del producto.
